Ana lleva colaborando en la revista desde el principio, desde el número cero. Por algo es la embajadora de la revista, además de la mejor coach del mundo.

Te dejo con la presentación de su sección «Hacer que suceda»:

No entiendo una vida sin arte.
En los momentos en los que me he sentido perdida, frustrada o vacía, este llegaba para recordarme que era especial y que estaba viva.

Me formé como Coach porque me di cuenta que tenía un talento muy marcado:
“Lograr que otras personas se transformaran de verdad”.

Desde adolescente, viví muchas experiencias en las que amigos y familiares me decían: me has cambiado la vida. ¡Jamás pensé que sería capaz de esto!

Di más de un giro profesional: de ambientóloga a cantante y bailarina. De animadora de hotel a consultora de robótica. De técnico ambiental a…

Comienza mi carrera de Coach profesional y yo seguía preguntándome:
¿y si hago de mi pasión mi profesión?
Recordé que había crecido rodeada de artistas:

directores de cine, dibujantes, bailarines y fotógrafos.

Entonces me topé con el sector que despertaría mi pasión: las artes escénicas.

Hoy, puedo decir bien alto que me apasiona mi profesión y esto gracias a mis artistas: me recordáis que TODO es posible.

Para hacerlo más emocionante, he creado el Coaching Experimental. Nuestra misión es quitar capas que no te sirven y llegar a tu verdadera esencia profesional.

Experimentar es probar, es lanzarte a algo nuevo. Es buscar, es vivir, es sentir, es transformarte porque nunca vuelves a ser igual.

He logrado mi sueño: hacer que todo sea posible y que el arte sea el protagonista.